José Pilar Quezada Valdès -sentado a la izquierda- y Agustín Caloca Cortés -Sentado a la derecha- alumnos en el Seminario de Guadalajaraa
... "en la Iglesia conviven asnos, mulos y machos cabríos, algunos tan salvajes que se sienten deseos de matarlos, pero no es posible porque 'el Amo quiere recibirlos todos en buen estado'."
El Cura de Torcy a su colega de Ambricourt, en: "Diario de un Cura Rural", de Bernanos.

lunes, 29 de abril de 2013

LA RESISTENCIA AL VATICANO II EN ACAPULCO




LA RESISTENCIA AL VATICANO II EN ACAPULCO
Pbro. Lic. Juan Carlos Flores Rivas

         Una visión romántica de la historia y de la Iglesia, nos podría hacer pensar que todo es miel sobre hojuelas, pero en el evangelio nos advierte que el Reino NO es de esa manera. Ya Nuestro Señor Jesucristo, al explicar a sus apóstoles el misterio de la Iglesia, les dijo: “El reino de los cielos es como un hombre que sembró semilla buena en su campo. Pero mientras la gente dormía, vino su enemigo y sembró cizaña en medio del trigo, y se fue. Cuando el tallo brotó y aparecieron las espigas, también apareció la cizaña.”…(Evangelio de Mateo 13, 24-26).
         Durante la época objeto de nuestro estudio, existía en Acapulco un sacerdote cincuentón, originario de Quechultenango, Gro.; formado en el Seminario de Chilapa, de donde llegó a ser profesor: EL PRESBITERO MOISES CARMONA RIVERA. El Padre Carmona desde 1959 fungía como Párroco de la Divina Providencia, en el Barrio de Dominguillo, en el Centro de la Ciudad y Puerto, cargando tras sus espaldas una historia personal difícil, marcada por el dolor y la incertidumbre, frutos de una personalidad difícil y compleja. Siendo este articulo una síntesis, la biografía amplia y el desglose de los presentes temas pueden ser leídos íntegros en internet, en nuestro blog http://ephemeridesacapulcanae.blogspot.com
Desde 1965 Carmona parece iniciar los conflictos con el Obispo cuando se niega a celebrar “la Misa reformada”, a pesar de que en un principio fue uno de los primeros en asumir con entusiasmo el nuevo Ordo Missae, celebrando la Misa correctamente, y de repente dio un cambio, sin que se pudiera por ningún medio hacerlo entrar en razón (Cfr. Testimonio escrito del 5 de Diciembre de 1974). Pronto, se verá relacionado con un sacerdote jesuita excomulgado, Joaquín Sáenz Arriaga del Distrito Federal, siendo éste su primer contacto con quien asume sus decisiones radicales, y al mismo tiempo, entra en contacto con tradicionalistas alemanes, franceses y argentinos.
El 16 de Marzo de 1974 Carmona escribe a Monseñor Bello un poema: “Al Padre Rafael Bello Obispo preconizado”, el último verso dice: “A nadie temas por cumplir tu oficio, y si alguien, Padre Bello, se te opone y otra misión distinta te propone, preferible es morir que claudicar”.... El 25 de Marzo de 1974, tuvo lugar la Ordenación Episcopal del nuevo Auxiliar para la Diócesis de Acapulco, Monseñor Rafael Bello Ruiz, quien distinguió a Carmona invitándolo como Padrino de su Ordenación. Carmona asistió a la ceremonia, pero no quiso concelebrar, estuvo presente revestido de sotana y roquete, se veía incómodo y como a fuerza, con mirada torva y pensativo. No agradeció el gesto de atención.

Reconvenido por todos los medios a su conversión, Carmona fue radicalizando sus posturas. En 1976 fue fundada la Unión Católica Trento, siendo el primer Presidente Nacional hasta su muerte, con la cual sistematizó sus ataques contra el Concilio Vaticano II, y las reformas litúrgicas promovidas por el mismo.
El 8 de Diciembre de 1976, tiene lugar una Misa en Dominguillo, que pretendía ser presidida por Monseñor Marcel Lefebvre, al cual se le impidió el ingreso a México; y finalmente fue presidida por un delegado, el Presbítero Héctor Bolduc, en el marco de una Reunión de la Unión Católica Trento, el evento marcó una total ruptura del carmonismo con la Diócesis. El 5 de Mayo de 1977 Monseñor Bello declaró oficialmente a toda la Diócesis de Acapulco, en Carta Circular, que el Presbítero Moisés Carmona Rivera había incurrido en excomunión latae sententiae y la censura canónica de suspensión a Divinis, privándole de la Parroquia de la Divina Providencia y declarándola vacante ipso facto.
El 17 de Octubre de 1981 en Toulum, Francia, Moisés Carmona Rivera recibe ilegítimamente la Ordenación Episcopal, de manos de Monseñor Pedro Martín Ngo-Dinh-Thuc, Arzobispo vietnamita de Hue, junto con Adolfo Zamora, religioso mercedario. El 25 de Febrero de 1982 tiene lugar la famosa Declaración Sedevacantista, firmada por Monseñor Pedro Martín Ngo-Dinh-Thuc. Declaración con la cual Carmona y sus seguidores abandonan su aventura Lefevrista y se separan en una secta independiente. Para el mes de Mayo de 1983, tiene lugar una reunión de los obispos cismáticos en el Barrio de Dominguillo.
Para el 11 de Julio de 1984 se da la retractación del Arzobispo Pedro Martín Ngo-Dinh-Thuc. El mismo día Monseñor Thuc escribe al Presbítero Moisés Carmona Rivera pidiéndole su retractación y su vuelta a la Iglesia Católica.; este arzobispo fallece el 13 de Diciembre de 1984 en Carthage, Missouri, USA.
En Diciembre de 1988 llega a Acapulco siendo diácono Martín Dávila Gándara, para colaborar con Carmona, hasta su ordenación; el 29 de Junio de 1989 fue ordenado Dávila Gándara, por Carmona. Y de hecho, este será su sucesor, cuando el 14 de Octubre de 1998 es elegido por la Sociedad Sacerdotal Trento, por votación; y el Martes 11 de Mayo de 1999, fue ordenado ILEGÍTIMAMENTE obispo por Mark Anthony Pivarunas.
1 de Noviembre de 1991: Carmona fallece en trágico accidente automovilístico, sin haberse reconciliado con la Iglesia, sobre la autopista México-Querétaro, a la altura de San Juan del Río. Trasladado a Acapulco, exequias en el Templo de la Divina Providencia, sepultura en el Panteón de Las Cruces. Actualmente sus restos descansan en el Templo de Dominguillo.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

¿Por qué dice usted que Monseñor Martín Dávila Gándara fue consagrado Obispo ILEGÍTIMAMENTE por Monseñor Mark Anthony Pivarunas de USA?

Anónimo dijo...

esto es falso nunca fue ilegitimo es preferible seguir a Dios que a los hombres el concilio vaticano II solo ha causado escandalos, la Iglesia perdura en los grupos tradicionalistas.